Vives arropado del sentir fastidioso de soledad, un vacío en tu interior oprime el corazón mientras te asfixias con tu propio aire. En todo lugar te sientes solo. ¡Que desagradable! Preocupa pensar que estamos rodeados de gente que luce feliz pero en quienes su inseparable compañía es la soledad. Lo peor es que no están solos, ellos se sienten solos, desconectados de todo y de todos. Cual sea el origen esta sensación se sustenta en la desesperanza, e insatisfacción encerrándose en si mismos como dentro de un caparazón.
Estar solo es no tener con quien compartir pero sentirse solo tiene que ver con nuestro estado anímico por tanto es distinto y causa sufrimiento. Se torna en su enemigo al dejar de vivir para aliarse a la depresión, tristeza, desamor, negatividad, abandono, hasta creer que la vida carece de sentido. Destierra esas ideas negativas del ayer donde estas atascado impidiéndote pensar y debilitándote para lidiar racionalmente contigo por lo que quizás los demás se apartan.
Aprovecha el silencio y oye tu voz interior sin dar cabida al desaliento que impida conectarte con tu ser. BASTA, declara paz interna, eleva tu autoestima. No permitas que nada ni nadie te mengue. Inténtalo y déjate guiar. Aprópiate del presente. Mira lo que tienes no lo que no esta. Sondea tus adentros, derriba tu fortaleza, haz nuevas relaciones y actividades, no te auto destruyas. Alza tus ojos a Dios y disfruta su Presencia hasta aprender que sentirse solo es una opción no importa que hoy tengas 60, 70 80, 90, 100 años de vida.
autora Raquel Demorizi
NOTA: SE PERMITE LA REPRODUCCIÓN PARCIAL O TOTAL , SIEMPRE Y CUANDO SE CITE LA FUENTE Y/O EL NOMBRE DE SU AUTORA
No hay comentarios:
Publicar un comentario