Y cuando lleguen no te puedo mentir te partiran en múltiples pedacitos y como un rompe cabezas deberas iniciar su construcción colocando cada pieza en el lugar correspondiente.
Pero gracias a Dios contamos con sus fuerzas para recuperarnos y continuar heridos pero fortalecidos. Deja que El sea tu guía, totalmente entregado en sus manos, cuando creas que todo te falta siempre puedes contar con El y eso es gran noticia. Si piensas que tus años son muchos y que a pocos les interesas es mentira, es tu imaginación eres importante para muchos y mucho más para Dios. No lo olvides
autora: raquel demorizi
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